La gastritis es la inflamación del revestimiento interno del estómago.
Las causas comunes de la gastritis son el excesivo consumo, a lo largo de los años, de condimentos fuertes, bebidas irritantes, bebidas muy calientes, alimentos con alto contenido de azúcar refinado, el consumo de alcohol o el uso prolongado de medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE) como la aspirina o el ibuprofeno. Asimismo el hábito del tabaco y algunas drogas pueden desencadenar una gastritis.
La gastritis también puede desarrollarse después de una cirugía mayor, de una lesión traumática, quemaduras, infecciones graves, cirugía de pérdida de peso con aplicación de bandas o reconstrucción del tracto digestivo.
Entre las causas crónicas encontramos
la infección con bacterias, como el helicobacter pylori, el reflujo biliar crónico y el estrés. Ciertos trastornos autoinmunes también pueden causar gastritis.
El síntoma más común es el malestar abdominal y el dolor. También puede padecer indigestión, distensión abdominal, náuseas, vómitos y anemia perniciosa. Algunos pueden tener una sensación de llenura o de ardor en la parte superior del abdomen.
En cuanto al tratamiento, generalmente se prescriben antiácidos líquidos o en tabletas. Los antiácidos neutralizan el ácido del estómago y puede proporcionar rápido alivio del dolor. Cuando los antiácidos no funcionan suelen indicarse medicamentos tales como cimetidina, ranitidina, famotidina o nizatidina que ayudan a reducir la cantidad de ácido en el estómago.
Encontramos también muchos productos naturales que proporcionan alivio y protección contra este molesto padecimiento que es la gastritis.